Juguemos al "Todo vale"

   Objetivos, objetivos, objetivos... ya no sólo en el trabajo es la palabra que más prima en el día a día, sino que ya, poco a poco todo se está convirtiendo en conseguir objetivos! Objetivo de dejar de fumar, objetivo de ser mejor persona, objetivo de ser feliz... ¿Porqué siempre nos proponemos un objetivo para todo, si luego lo más normal es que no lo consigamos?
   Pero ya no es el que lo consigamos o no lo que a mi me preocupa, sino el como llegamos a conseguirlo. ¿podemos utilizar la expresión de "en el amor y en la guerra todo vale"? ¿podemos decir claramente que "el fin justifica los medios"?

   Por mi trabajo, estoy cansado de ver como, en ciertas ocasiones, a ciertas personas se les "engaña" (siempre entre comillas, porque no hay que ver el tenor literal de la palabra) para conseguir cuadrar los números a final de mes. Como el ENTE que nos da de comer a todos, nos da las pautas para urdir esos "engaños" y poder alcanzar los objetivos marcados. Para ello, y si es necesario, somos "engañados" los trabajadores mismos en este engranaje piramidal que supone una gran empresa, ya que no siempre conocemos toda la verdad. Y señores, esto NO es defendible bajo ningún concepto! Jugamos con la confianza de muchos para llenar los bolsillos de unos pocos.
   Como mi empresa, habrá muchas más que hagan lo mismo, no creo que ningún sector se libre de las artimañas y argucias necesarias para embaucar al pequeño consumidor, que como siempre, es el desfavorecido en todo esto; desde el  sector servicios, el alimentario, el financiero pasando por el comercial, el sector turismo y todos los imaginables, ninguno se libra de conseguir sus objetivos a cualquier precio.

   ¿Realmente "todo vale"? ¿Por qué a sabiendas de lo que pasa, no ponemos fin a todo esto? Parece que todos en mayor o menor medida, estamos de acuerdo con lo que ocurre en nuestros trabajos, sino... no seguiríamos en ellos; pero tenemos una hipoteca que pagar, una nevera que llenar, unas facturas que hacer frente y eso hace que queramos o no, hagamos lo que nos mandan. Yo puedo quejarme, puedo dar la razón a mis clientes, e intento ser lo más honesto que puedo en mi trabajo, pero tengo que vender, tengo que llegar a mis objetivos para que la silla que ocupo en mi oficina, tan cotizada hoy en día, no me la quite nadie. Quizás muchos penséis que soy un cobarde, y puede que tengáis razón, pero me voy a casa con la conciencia tranquila, porque intento, desde dentro de la empresa y en la posibilidad que mi puesto me permite, hacer todo lo que está en mi mano para que esos "engaños" que nos "obligan" a hacer, no sean repercutidos en quienes no los merecen.  Intento tener conciencia y principios para no perjudicar a nadie y me voy muy satisfecho a casa. Me pregunto si todos pueden decir lo mismo... (ya sea dentro de mi empresa o de cualquier otra) porque si yo contara... puedo hablar de más de un "sin-alma" ni dignidad, que por ser el/la primera en listas, es capaz de vender a su propia madre.

   Yo, de momento ( nunca se sabe como ni donde voy a acabar...) sigo teniendo principios, sigo teniendo mi pequeña alma, y a pesar de que pueda costarme alguna que otra bronca por parte de los jefes, o no ser el mejor en todo (y por consiguiente no escalar puestos en la empresa) duermo perfectamente por las noches y esto, no creo que todos puedan decir lo mismo!!