Mostrando entradas con la etiqueta desamor. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta desamor. Mostrar todas las entradas

viernes, 8 de junio de 2012

El amor y calzoncillos por el suelo

   En un comentario que me dejó AntWaters del blog Fuertes del Mar, había una frase que me hizo pensar en un tema muy específico y que trata sobre el amor y la convivencia, la frase en cuestión decía algo así como que Punset tenía que pensar en “el amor y recoger calzoncillos por la mañana” la cual, pienso tiene toda la razón...

    Como ya escribí en mi entrada anterior (El amor nos vuelve gilipollas) al principio de una relación, todo es bonito, perfecto, estupendo y sin problemas... toda estas aventuras idílicas, se convierten en unas ganas, cada vez mayores, de una convivencia conjunta, siempre que se tenga la posibilidad claro está, de hacerlo, un acercamiento más intenso y un deseo casi de verse las 24 horas, que es lo que la química de la que hablaba en la entrada anterior, te hace desear. Cuando estamos enamorados, cualquier espacio de tiempo alejados de nuestro amado/a, nos parece una eternidad.
    Pues bien, al principio de la convivencia, cualquier mínimo detalle se hace mágico, estupendo, algo por lo que tener motivos para celebrar... la primera comida en el nuevo hogar, la primera cena, el primer polvo en la ducha del domicilio marital, la primera colada juntos, cuando toca hacer limpieza a fondo del piso en pareja... todo es perfecto, parece que estuviéramos viviendo en un cuento de hadas... pero cuando pasa el tiempo, y todas esas “primeras veces” ya se convierten en unas terceras, cuartas o quintas... la cosa cambia! ¿Por qué creéis que en las películas siempre termina la historia cuando el chico se queda con la chica y se van a vivir juntos? Pues porque si nos mostraran el día a día de la pareja, ya no sería tan perfecto todo, veríamos sus discusiones del porqué no has hecho esto, sus quejas por las cosas mal hechas, las excusas para no hacer las obligaciones del día a día... y no es que lo quiera poner fatalista, pero esas cosas pasan ¿o no?

    Hay días que acabas hasta las narices de recoger los calzoncillos que se quedan en el suelo del baño, prefiero recoger los del dormitorio, signo de que la noche anterior se ha dormido poco. ¿Podríamos decir que la convivencia mata al amor? No se si me atrevería a decir tanto, pero si creo que lo va mermando. Por eso, hay que hacer de la convivencia algo diferente cada día, inventar cosas, alguna que otra sorpresa de vez en cuando... es difícil, lo sé, pero quien algo quiere... algo le cuesta. Y no me voy a poner fatalista, ni negativo, también la convivencia tiene sus cosas buenas, y tenemos que apoyarnos en ellas para seguir un día más; cuando llegas a casa y está él esperando con la comida hecha, cuando te quedas dormido y te despierta con un beso para que no llegues tarde a trabajar, cuando el tendedor lleva 3 días ahí, estático y un buen día te das cuenta que ya está todo doblado y recogido, cuando te encuentras notas de amor por toda la casa... esas cosas, son las que hacen bonita la idea de irse a vivir juntos, son por las que merece la pena la decisión de compartir el día a día con tu pareja en el mismo hogar. Al fin y al cabo... eso es lo que queríamos ¿no?

   Y tú... ¿cansado de recoger calzoncillos por el suelo?

viernes, 18 de mayo de 2012

Consultorio Sentimental III

   Un viernes más, aquí tenemos las respuestas a las diversas preguntas que me hacéis... ya sabéis que si tenéis alguna duda, alguna cuestión o algo que os inquiete, sólo tenéis que escribir al correo habloloquesiento@hotmail.es y contadme todo aquello que os preocupe, pero también vuestras anécdotas o historias varias, que yo estaré encantado de leer y también de publicar... Con esto quiero decir, que si queréis que hable de algún tema en concreto, que de mi opinión (si es que os interesa), también podéis comentármelo en este correo. Gracias de nuevo por vuestra lectura...

Empezamos con la historia que nos plantea Anónimo... que dice lo siguiente:
   Estoy saliendo con un chico, que es lo más importante que tengo en todos los aspectos, aunque por desgracia estamos separados por unos cuantos kilómetros. Es cierto que a veces esos kilómetros joden y mucho porque te gustaría estar con esa persona todo el tiempo y no puede ser porque cada uno tenemos unas obligaciones que cumplir...
   Hasta ahí todo bien, el problema es que mi novio muchas veces no confía en mi y cree que me invento las cosas para ponerle excusas o que simplemente le digo que estoy en un sitio y estoy en otro. estoy harto de repetirle que eso no es cierto, solo espero que algún día me crea y sea para siempre...

 Querido amigo, decirte que si ese chico al que tu quieres tanto, no confía en ti, tenemos un problema! La confianza es la base de toda relación y el pilar fundamental que la sustenta, así que yo te diría que hables con él sobre el tema y que lleguéis a una visión más concreta del asunto: los motivos de esa desconfianza. A veces esos motivos son la clave, ten paciencia, pero si ves que aún así las cosas siguen igual, dale una buena bofetada! a ver si reacciona. A veces la confianza es ciega y otras, hay que ganársela. Todos tienen que poner de su parte. Ya me contarás...

Otro de mis lectores David MX (que de vez en cuando me deja algún que otro comentario en el blog, cada vez menos, todo hay que decirlo) nos comenta...
   Mi problema siempre ha sido el poder acercarme a un tío para ligarle. Bueno, primero para saber si es gay. Como me gustan los hombres que parecen hombres y mi radar gay nunca ha funcionado, a lo mejor me puedes decir como hago la faena.
    Como inicio, como sé si es gay y luego como cierro el trato. Y no que quiera llevármelo a soplarle el culo a la primera (que no estaría mal) sino que la cosa se mueva un poco hacia adelante y no quedarme como perro de aparador.

   Primero, decirte que me encanta la expresión "llevármelo a soplarle el culo" jajajaja (#muerome) Segundo, comentarte que a casi todos nos gustan los hombres que parecen hombre, porque para irme con un hombre que parece una mujer... me voy directamente con una y asunto resuelto! Por el problema que me comentas, yo te diría que actúes en primer lugar con el juego de las miradas (el juego de la seducción) un pequeño acercamiento... si al chico en cuestión no lo ves incómodo, da otro pasito más... así hasta que pase lo inevitable. Hay que fijarse en el lenguaje corporal, que es muy importante, él te dirá si tienes que seguir actuando o retirarte. Hay otra gente que le funciona el estilo "directo" pero para eso tienes que estar muy muy bueno (que no se si es el caso), cada uno tiene unas armas únicas, sólo hay que saber sacarles partido.


   Tengo otras historias en el tintero... pero la siguiente es un poquito más largas, así que la dejaré para un post entero. Sólo emplazaros para que mandéis los correos con todas las cuestiones o historias que me queráis contar... Nos vemos en el próximo consultorio!!

viernes, 27 de abril de 2012

Consultorio Sentimental...

   Se me acaba de ocurrir una idea, que espero os guste, y sobre todo que os "abra" la vena participativa... (venga, no me dejéis con el culo al aire!!) es fácil y no conlleva más que unos cuantos minutos de escritura, se trata de plantear preguntas, tipo "Consultorio Sentimental del Dr Amor" para que yo, me declaro desde ya, experto en la materia, pueda contestarlas, ya sea de forma seria, de forma sarcástica o de la forma que crea conveniente según el cariz de la pregunta.


   Con esto también quiero ver vuestro grado de participación en este blog, qué ingeniosos llegáis a ser, qué de difícil me lo podéis llegar a poner... y contestar, si mis conocimientos me lo permiten, todas vuestras dudas. Prometo ser serio cuando la ocasión lo requiera, y sarcástico cuando también sea necesario; pero siempre respetuoso con todos vosotros. Y si son muchas las preguntas (que espero que si) y si conseguimos que esta sección tenga éxito, prometo escribir un post semanal con vuestras cuestiones y sus respuestas.


   Para plantear vuestras cuestiones, os dejo el correo electrónico del Blog: habloloquesiento@hotmail.es donde podréis escribir de forma anónima, pública, con seudónimo o como vosotros queráis, las preguntas que me queráis hacer. Sexo, amor, relaciones de amistad, de pareja, paterno-filiales ... etc.
   Tampoco os toméis esto como si fuera el consultorio de un experto y afamado psicólogo especializado en temas de amor/desamor ... simplemente, como un consultorio de una persona que por suerte o por desgracia sabe bastante de estos temas... y no es que "sepa más el diablo por viejo, que por diablo" sino que en este caso, el diablo, es mucho diablo!!


   Así que lo dicho queridos lectores ... espero vuestras preguntas y colaboraciones ¿Que os pasa por la mente, que siempre quisisteis preguntar y nunca lo hicisteis? 

Ahora es el momento... ¿te atreves?

miércoles, 28 de marzo de 2012

Yo te quiero, tu me quieres, tu te quieres, yo me quiero... y el lenguaje del amor.

   Hace ya un tiempo que guardo en mi poder esta entrada que pedí a un amigo (también comentarista aférrimo del blog, que cada vez me tiene más olvidado) Una entrada que quiero compartir con todos vosotros ya que en muy sabio en palabras, con una legantísima manera de escribir. Espero que os guste... (porque a mi, me ha encantado) A ver cuando se anima y empieza él también a escribir un blog, porque os aseguro que tiene mucho que contar y muy bien contado.






Me pide el blogmaster que haga alguna entrada en este su prestigioso blog, así que en eso estamos. Por supuesto, "agradecidos y emocionados" que cantaba nuestra Lina Morgan en sus funciones. Va por ti destroy114, gracias.



Yo me, tu me, tu te, yo me, ... resultan un buen galimatías de pronombres personales y reflexivos, pero también son, ni mas ni menos, los flujos afectivos en la pareja. Del uno hacia el otro, del otro al uno, y de amb@s hacia si mismos.

Y la pregunta es: sabemos reconocer los signos asociados a cada uno de esos canales afectivos? El "me quiero" y el "te quieres", obviamente si, más o menos nos conocemos a nosotros mismos, pero y los que nos manda la pareja? Las mas de las veces no, y suele ser fuente de malentendidos y mal ambiente. Así que aqui os dejo unas indicaciones para no perdernos.

Hace poco leí a Elsa Punset, hija del estudioso Eduard Punset (del cual me declaro ferviente seguidor), en su libro "Brújula para navegantes emocionales". En él, citaba a algún experto que establece cinco tipos de expresar y recibir amor:

  • a  través del contacto físico
  • compartiendo tiempo de calidad con las personas
  • haciendo regalos
  • con actos de servicio
  • a través de las palabras.

Los denomina «lenguajes de amor» porque gracias a ellos podemos comunicar y recibir amor de forma directa y clara.
Cada persona tiene uno o dos lenguajes específicos con los que se siente especialmente cómodo para percibir y expresar amor. A veces expresamos amor en un lenguaje y deseamos recibirlo en otro. Si nadie nos habla en nuestro lenguaje de amor, nos resultará difícil sentirnos amados. Intentaremos provocar en los demás la expresión de amor en el lenguaje que entendemos mejor y sentiremos frustración si no lo conseguimos.

De esta forma, si eres de los que expresa su amor con "actos de servicio" y tu pareja prefiere recibirlo mediante "regalos", tu media naranja no se sentirá amada, puesto que no recibe los regalos que espera, y tu te sentirás quemado porque piensas que estás dando mucho amor, aunque en realidad no es reconocido como tal por la otra parte.

En definitiva, conviene pararse a analizar:  ¿como expresas tu amor? ¿Y cómo te gusta recibirlo? ¿Y tu pareja? ¿Lo estáis haciendo bien?

Espero que con este pequeño manual de uso, todos os ubiquéis y que reconozcáis también a vuestra media naranja. ¿A que os explicáis algún malentendido en vuestras relaciones actuales o anteriores?

Pues de eso se trata.

Hasta otra, navegantes, calibrad bien vuestras brújulas.

miércoles, 7 de marzo de 2012

Amar duele

   La frase que más repito últimamente es "Tengo que escribir sobre esto!" día tras día, se tratan a nuestro alrededor miles de temas que pasan inadvertidos, pero que podrían ser perfectamente un buen argumento para un Best Seller. Hoy y para no perder la costumbre... hablaremos de amor, de amores secretos, de amores en la sombra.

   Si es difícil amar y no ser correspondido, más duro se hace amar y no poder gritar al mundo lo que se ama; ya sea por ser un amor prohibido, un amor imposible o simplemente por miedo (pero de esto, ya hablé alguna vez) complicado se vuelve el amar sin encontrar el cálido premio de los besos y las caricias. Cuando desde la sombra, te dedicas a admirar a alguien, a transformar sus defectos en virtudes, a reír a cada palabra y a desear cada gesto, el vacío que provoca no poder expresar los sentimientos te hace cada vez más vulnerable a la tristeza. Y es que lo prohibido es lo más querido y aunque nunca las palabras logren salir más allá del alma, siempre estará grabado en la mente, las inmensas ganas de poseer su corazón. Los celos nunca serán comprendidos, porque no hay razón para ellos cuando no se muestra que algo es querido, la justificación de tus actos se volverá vacía si no se conoce que es por amor. 
   Cuando se ama desde el silencio, el simple roce con su cuerpo es el máximo anhelo, las miradas fugaces son el premio a sentirle cerca, que una sola palabra sea dirigida hacia ti es el motor que hace palpitar tu corazón, pero siempre desde las sombras, con el temor de ser descubierto y pensar que ya nunca te tendrá al menos en su pensamiento, miedo de hacer o decir algo que te deje en evidencia, algo por lo que no ser comprendido, algo por lo que ya nunca te vuelva a mirar, a hablar o incluso a rozar...

   Amar en silencio es cruel, es como cuando se mira a los ojos y se quiere decir lo que se siente, pero el muro del silencio se interpone entre los sentimientos; cruel, porque la soledad invade el deseo y lo hace oscuro, te va recomiendo por dentro poco a poco, adsorbiendo tus fuerzas y esperanzas, sin poder chillar que se ama. Vacío, solitario, callado... sentimientos que anteriormente no tenían sentido, son consecuencias de tu silencio.
   Como decía la canción "amar duele..." pero amar desde el anonimato, hace sangrar el alma. El ser humano no puede vivir sin amor, no puede vivir sin sentir y expresar lo que se siente, pero que cruel es la vida cuando hace que te enamores de quien jamás podrá darte ese amor. Uno no es dueño de sus sentimientos, y no elige de quien se enamora. "Amar duele, pero vivir sin tu amor... no se puede"

jueves, 23 de febrero de 2012

Cuando los gatos maullan a la luna...

 Como ya os dije en una entrada anterior... voy a tirar de amigos que me escriban alguna colaboración (pero sólo alguna, no los voy a tener como negros, escribiendo par mi) y así, hacerlos  participar de este blog. Suelen ser, lectores asiduos del mismo, y a la vez amigos. En esta ocasión, os voy a presentar a una chica (@geigrl), que desde casi que empecé a escribir, por no decir, desde el primer minuto que empecé a escribir, me ha estado comentando los humildes relatos que plasmo en este sencillo blog... (últimamente me tiene un poco abandonado y eso no me gusta nada) en esos comentarios que ella tan genialmente me hacía, se atisbaba una brillante escritora. Encantadísimo de contar con ella en mi grupo de amigos "de todos los días" y deseando que leáis sus pensamientos, espero que os guste todo aquello que nuestra gatita nos tiene que contar...


   Lo prometido es deuda y, aunque no es lo que tenía preparado para esta colaboración, ni me encuentro en mi mejor momento ni en el más creativo, sigo siendo una soñadora nata empedernida.

   No puedo evitarlo, esté entre las sábanas o esté sobre ella divagando, mi más poderosa guía entre horas de madrugada, la luna, se hace dueña de estas palabras.
Y es que pensando, todavía me sorprende lo caprichosa que puede ser cuando posee mis noches y mi mente, quizá soy demasiado lunática pero, sobre todo, cuando posee la de todos los que la miran con magia.......me fascina... y es que la nostalgia nace sola para todos nosotros al observarla...
Y qué triste y pálida cuando, en noches solitarias como la de ayer, los corazones desprotegidos, embriagados por un vacío, la observamos llorar desde una vieja ventana, y entierra el cautiverio de aquellos gatos pardos que caminamos sinuosos sin rumbo fijo y jugamos a ser equilibristas por los tejados de la ciudad en busca de la melodía “perfecta”.
Quizá la encontremos si suena en alguna calle, en algún bar encantado o incluso en algún efímero sillón... o quizá, al buscar, nos encontremos con el cartel de “cerrado” y nunca más volvamos a pasar por ninguna calle y no volvamos a VER a OIR y a EXPRESAR nuestros sentimientos por mucho tiempo...

   Esta calma que desprende, la que custodia mis noches, me hace sentir uno de esos gatos en manos del azar. Unas noches, camino bajo su manto abrigada por la memoria, puedo hablar, puedo oír y puedo sentir a corazones olvidados por un momento, otras, me guiña un ojo y me cuenta que este es mi momento, que ahora las noches me pertenecen, que, como dice la canción, la noche es de los que aman...
Esa calma es la que debería hablar por mí ahora, la que me abrigase en las noches de invierno, las que me hiciesen sentir un gato en compañía, los que se suben a la ventana y duermen acurrucados y juntitos, los que fuesen a buscar esa melodía, la encontrasen y se quedasen a bailar con ella... ... Otras, me hace sentir un gato callejero, los que pasean en la noche, custodiados por ella, desenterrando una fría libertad por las calles y sus recuerdos.
   De momento, seguiremos paseando una vez más de la mano de la más bella dama de la oscuridad, soñando, divagando y siendo lo que soy, una lunática empedernida que busca su canción...

lunes, 30 de enero de 2012

¿Porqué siempre hablamos de AMOR?

Que gratificante el reencuentro con tus amigos de toda la vida, aquellos compañeros de juergas, travesuras, penas y risas que conociste en el colegio y que con el paso del tiempo, siguen presentes en mayor o menor medida. Que reconfortante, darte cuenta de que no ha pasado el tiempo, que las historias siguen siendo las mismas, que después de varios meses sin vernos, las risas siguen estando presentes, y que nosotros somos una calcomanía de como fuimos cuando éramos un poquito más jóvenes. Después de 14 meses sin vernos, las mismas mofas, los mismos chistes, los mismos juegos, y las mismas risas, pero un poco más responsables... y es que lo único que nos ha cambiado, son eso, las responsabilidades, y a algunos más que otros (los que son padres, lo comprenderán...)

   Como dice la canción de Presuntos Implicados... "cuanto hemos cambiado" ...sin darnos cuenta, sin apenas apreciarlo, nos hemos hecho adultos, siempre sin perder nuestro lado más gamberro, más irónico, más travieso, pero aderezado de un toque de responsabilidad. Y aunque ya todos paguemos facturas, tengamos hipotecas en el banco, o nos preocupemos de si los sueldos llegan a final de mes, yo no hablo de ese tipo de responsabilidad, sino de la madurez que se crea con la sabiduría de los años, el juicio que crean las experiencias, la sensatez adquirida con los acontecimientos de la vida.
   Sin ir más lejos, ellos mismos, que se mantienen constantes y fieles a sus parejas de toda la vida, hablan del amor de una forma diferente a como cuando éramos adolescentes, hablan de algo más que un compromiso, de un compañero para lo bueno y para lo malo, de una complementación de igual a igual... ¿eso es el amor? ¿Realmente sólo nos damos cuenta del amor verdadero cuando somos lo suficientemente conscientes y maduros para ello? Siempre ha pensado, quizás por mis experiencias anteriores, que el amor, como todo, tiene una fecha de caducidad, quizás esa obsesión por las "fechas de extinción" hace que no pueda creer en el amor como algo que va evolucionando en el tiempo, que se va transformando hasta convertirse en sentimientos, sensaciones, sensibilidades que ni siquiera conocemos. Estamos tan llenos de información, saturados de problemas, y tenemos tantas posibilidades de opción al alcance de nuestra mano, que a la mínima, dejamos de luchar... y el amor, es luchar cada día, es sorprenderse cada mañana, descubrirse el uno al otro en algo nuevo, es comprender que AMOR no solo es amor, son muchos sentimientos a la vez:  compasión, conmiseración, conmoción, afecto, piedad, ternura, dolor, tristeza, pesar, delicadeza, pasión etc... y descubrirlas cada día, es lo que nos hace ser más maduros, más responsables, más sensatos.

   De ese compromiso, y como signo de unión y progreso, surgen los niños... y en eso mis amigos, deben tener un diploma, porque ahínco le ponen a sus relaciones... Contento estoy yo con ser el tío "del saco" para esas criaturas!! Pero lo de los niños, y lo bien que me llevo con ellos, se merece un post aparte.

jueves, 19 de enero de 2012

Cuando el amor se convierte en monotonía!

   Y una vez más, hablo de sentimientos... en este caso, de las pequeñas cosas que se dejan de hacer, que se olvidan, que se dan por hechas, que creemos que se sobreentienden, porque son todas esas cosas, cuando ocurren, lo que crean la monotonía, y es esa monotonía, lo que mata las relaciones.

   En los comienzos, todo es perfecto, bonito, sorprendente y mágico... lleno de detalles, de sorpresas, de regalos escondidos y frases apuntadas en cualquier rincón, de escapadas furtivas, de planes a realizar, de experiencias nuevas, de besos robados, de "te quiero" inesperados, de llamadas nunca inoportunas y de todas esas cosas que hacen que las mariposas revoloteen locas por la tripa. Pero a medida que pasa el tiempo, a medida que el día a día va haciendo de las suyas, los mensajes dejan de ser tan frecuentes, las llamadas, ya no tan abundantes ni largas, los besos se vuelven automáticos, los planes ya no son del agrado correspondiente, las sorpresas y regalos, los justos y por exigencias del guión y los "te quiero"... desaparecen por completo.  Si todas esas ilusiones desaparecen... quien va a ser el encargado de alimentar la llama? Quien va a ser el fuerte que tire del carro?
   No hay que dejar nunca nada por hecho, hay que ofrecer besos inesperados, planes insospechados y soltar un "te quiero" en mitad de la nada para demostrar (siempre con intención de ello) que quieres a la otra persona. Sí, ya lo sé, todos nos sabemos la teoría... entonces, Por qué no lo hacemos?!?! El estrés, el cansancio, la monotonía, la dejadez, son causas que influyen en que cada día que pasa, perdamos más el interés por la otra persona. Y no nos engañemos, esto es un juego de dos, si uno no hace, el otro hará menos, por vagancia, por desazón o por cualquier otro motivo, y el final se convierte... en un fracaso estrepitoso!

   Pensadlo, a parte de lo guapo/a, gracioso/a, simpático/a, atractivo/a, morboso/a, inquietante, o cualquier otro adjetivo calificativo que os pudiera resultar vuestra actual pareja en los comienzos... ¿Que es lo que también os conquistó? ... los mensajes inesperados, los detalles que sin ningún motivo aparente os hacía, una frase bonita dicha así, sin más, sin pensar... en definitiva, los detalles! Esos detalles son los que realmente conquistan, son los que hacen querer más de la otra persona, esperar la próxima sorpresa... (eso, y que sea bueno/a en la cama) y cuando empiezan a desaparecer, cuidado, eso significa que la monotonía se ha instalado en vuestra casa, y cuando eso ocurre, muchas veces, se instala para no irse nunca más. El único miedo que hay que tener en una relación de pareja es ese, a mi entender, el más peligroso, porque puede ser el consecuente de otro más graves, simplemente hay que poner algo de nuestra parte para que eso no ocurra. ¿Como? os preguntaréis... pues realmente, no tengo la respuesta mágica que arregle todo, yo también tengo que luchar contra ella. Pero si alguno de vosotros, sabéis la respuesta... ya sabéis donde encontrarme.

miércoles, 4 de enero de 2012

Raros, raritos... y simples de nacimiento!

   ¿Que difíciles son las relaciones interpersonales verdad? Encontrar una persona con la que congeniar, es algo complicado... y a veces, cuando encuentras a ese alguien, con el que crees que puedes mantener una conversación de más de 20 minutos antes de irte a la cama... resulta que "no quiere compromisos" (eso, o bien que el realmente no simpatiza contigo)

   Cada vez, nos volvemos más raros, incluso con nosotros mismos, en ocasiones ni siquiera nos aguantamos cuando nos miramos en el espejo. Cuanto más va pasando el tiempo, más rarezas, más manías, más "malos usos" en nuestro día a día y eso, es un arma de doble filo...
  • "Desprecias" todo lo que rechaza tus manías: Todo aquel que no las entienda, le parezcan absurdas, o no acepte aquellas pequeñas costumbres que has ido cosechando con el paso del tiempo, ya no es bien recibido. ¿Como puede alguien no entender esas pequeñas cosas que a ti te parecen de lo más normal del mundo? (Bueno, alguna vez, hasta tu mismo te sorprendes de ciertas manías... confiésalo!!)
  • Eres "despreciado" por quien rechaza tus manías: Y es que, a veces, las manías, caprichos, antojos, costumbres... se vuelven tan raras que no hay bicho viviente que las comprenda, y por consiguiente las asuma. Y no es por nada, pero cada vez, la gente está dispuesta a aguantar menos! Cualquier sencilla extravagancia, se convierte en la excusa perfecta para librarse de ti, llegan al punto de asustarse de tal manera, que son imposibles de comprender el porqué de las cosas.
   También tenemos el caso de la Persona Simple, que también las hay... es aquella que no tiene ningún tipo de  excentricidad, capricho, antojo, chifladura, obsesión, que todo le parece bien y que no se queja por nada, es aquel que le preguntas: -¿Y donde quieres ir? ¿Y que te apetece? ¿Comemos? ¿Te hace un cine? ¿Vamos a algún sitio? etc, etc... y sólo tiene una misma respuesta para todo: -A mi me da igual, lo que tu quieras! Es el caso de la gente a la que yo digo, no tener sangre en las venas... necesitan de vez en cuando un meneo para reaccionar, un chute de adrenalina para espabilarse!! Esta, si que es gente para echarle de comer a parte...

   Y no sólo nos conformamos con esto... cuando has conseguido que todo parezca "normal" ... llega congeniar en otro tema, mucho más importante... La cama!! Pero esto ya, será otra historia...

Continuará...

martes, 11 de octubre de 2011

Varias formas de "Tener"



   Es difícil reconocer que el camino en el que andamos no es el correcto, que estamos tomando una dirección equivocada... es ahí cuando tienes que tomar la decisión de salirte de ese itinerario, de coger las riendas de tu propio destino y ser valiente para dejarlo atrás...

   En ocasiones, tenemos que romper con algo para poder seguir adelante, más que romper, yo lo llamaría transformar, ya que muchas veces, no consiste en acabar con el 100% de la situación, tenemos que aprender a que existen otras formas de "tener" que pueden hacer menos daño. Cuando se rompe una amistad, una relación, unos recuerdos, es duro para las dos partes, tanto para el que tiene que finalizar el vínculo, como para el que se encuentra con ello roto. Pero detrás de todo eso, existen, seguramente, unas razones... hay momentos en los que tú mismo te descubres extraño, y llegas a la conclusión de que quizás, los pasos que estás dando, no sean la mejor opción, no llegan a ser tan profundos como a ti te gustaría, y estás haciendo al mismo tiempo que la persona que te acompaña en ese viaje, tampoco siga el recorrido adecuado; es entonces cuando tienes que tomar la dura decisión de dejar ese camino... pero muchas veces ocurre, que no nos damos cuenta de que no tienes porqué dejar ese camino atrás y que un manto de arena lo cubra, puedes ir a su par, puede que a veces el nuevo camino te lleve por partes del antiguo, y esa nueva forma de "tener" sea la mejor para no "olvidar".
   Dejar atrás las cosas que se quiere, es duro, por eso, yo soy partidario de que no desaparezcan de tu vida, pero también soy consciente de que existen momentos en que hay que hacerlo por el bien de todas las partes en juego, te puede costar más o menos darte cuenta, pero la vida, al final, te va a dar la razón; intentemos entonces que no sea una necesidad el que desvanezcan, vamos a transformar esa forma de coexistir.

   Nadie dijo que el día a día es fácil, y que los vínculos que vamos entretejiendo con las personas sean definitivos... pero hoy por hoy estoy totalmente convencido que esos lazos, no siempre tienen porqué finalizar, sino que se pueden transformar y conseguir volver a trazar un nuevo camino.

viernes, 10 de junio de 2011

Estamos matando el romanticismo??



   Creo, que en esta era de lo superficial, de mundos 2.0 y vidas aceleradas, hemos dejado el apartado de los sentimientos un poco desvirtuado y devaluado... muchos, sólo buscan citas esporádicas que les sean de provecho para conseguir un placer pasajero, al día siguiente... "si te he visto, no me acuerdo", otros se conforman con varios ligues virtuales que de vez en cuando, les suban el ánimo (y lo que no es el ánimo)... eso si, bien armados, con una buena webcam, por lo que pueda surgir! Incluso hay gente que por el miedo a sufrir... no quiere saber nada del amor.
  
    Pero... Donde se ha quedado el verdadero romanticismo?
   Tengo la sensación de que a veces, lo hemos tirado a la basura, como los restos que se quedan en la bandeja al terminar de comer una hamburguesa en cualquier establecimiento de comida rápida.

   Siempre me he considerado un romántico, soy de los que llora cuando está en el cine, viendo alguna película de esta índole, el chico que aún cree en los príncipes azules y que piensa que todavía existen personas como Richard Gere que suban por unas escaleras con un ramo de rosas para ir a buscar a su amado/a...  (es la escena que todos tenemos en la cabeza de Pretty Woman) pero todo esto se está perdiendo... ahora gusta más el modelo de chico duro, sin sentimientos, que sabe lo que quiere (esto último no es incompatible con el romanticismo) y va directo al grano... Ya nadie busca parejas estables... sino parejas de "quita y pon" hoy por hoy, o no se tiene tiempo para el compromiso, o se tiene miedo a él. Aunque todos digan que si, en el fondo huyen de los compromisos, de las obligaciones, de las relaciones serias.

    Y tendréis razón los que penséis que la pareja no se busca, sino que va surgiendo poco a poco... pero para eso... hay que estar predispuesto a ello!! (y preparado también!) No creo que todo el mundo sea capaz de amar y mucho menos de ser amado... pero es que mi sensación es que aunque se diga lo contrario, la vida que llevamos nos hace huir de los compromisos. No penséis que soy acérrimo defensor de la pareja como modelo a seguir, hay otras opciones, y todas válidas... pero muchas veces te cansas de oír a la gente que quieren un novio, alguien que les quiera... y cuando lo consiguen, se achantan y meten el rabo entre las piernas. La gente no sabe lo que quiere... sólo desean lo que ven, y cuando lo consiguen, se cansan enseguida... "-sociedad llena de niñ@s caprichos@s!!!" 

    Busquéis lo que busquéis, y encontréis lo que encontréis... por lo menos no perdáis el romanticismo, no seáis tan insulsos, tan memos de caer en las redes de lo superficial y de esta sociedad del "aquí y ahora" disfrutar del arte de la conquista, de la seducción, del romanticismo... y ya mañana, mañana será otro día...

miércoles, 18 de mayo de 2011

El dolor...



   Es increíble lo que el dolor puede sacar de nosotros mismos, como nos puede hacer sentir tan vulnerables e indefensos, hasta el punto de que cualquier cosa nos haga llorar, y como al mismo tiempo, en esos desgarros de sufrimiento y pena, son creadas las cosas más bellas... el poeta redacta entonces sus mejores versos, el pintor esboza entoces su mejor obra, el cantante compone su mejor soneto... y en cada palabra, cada pincelada, cada nota... va dejando un poco de esa agonía, compartiéndo su dolor con la humanidad y a la vez, desprendiéndose de él, lo que no sabe... es que ese dolor no desaparece, simplemete, y con el paso del tiempo... se transforma.
   Como podéis imaginar, no estoy hablando del dolor físico, sino del espiritual... el que se lleva dentro, el que nos rompe el corazón en mil pedazos, esparciendo los trozos de nuestra alma lo más lejos de nosotros posible, pero sintiéndolo tan dentro al mismo tiempo, que nos hacemos adictos a él...  no hay peor dolor, que el dolor del desamor.

   ¿Quien alguna vez no ha sentido ser apuñalado a traición por mil dagas afiladas, quien no ha visto apagarse las "5 farolas" al verse abandonado, quien no ha llorado lágrimas de sangre por desamor? y en esos momentos, hemos escrito, ya sea una carta, un mensaje, un trozo de papel roto... y no hay palabras más sinceras que esas, mucho más sinceras y reales que las que se escriben cuando se es abandonado, incluso mucho más que cuando se habla del mismísimo amor... Todos en esa situación hemos querido escuchar la canción más triste, la más melancólica, y esa voz que va esgrimiendo el canto, la hemos sentido propia, porque todo lo que decía, nos había ocurrido a nosotros... Nos revolcamos en nuestro propio dolor, para sentirlo más, para hacerlo más nuestro. Y eso dolor, aunque no nos demos cuenta en ese momento, nos hace más fuerte, nos hace crecer...
   Pensamos que estamos en un laberinto, en el que sabemos como hemos llegado, pero del cual no encontramos la salida... las paredes se van estrechando poco a poco, y cuando crees haber encontrado el camino adecuado, el camino que te llevará al final de ese sufrimiento... las paredes se vuelven a estrechar... y la luz que creías ver, desaparece. Entonces nos echamos a llorar de nuevo.
   Las historias mas bellas se han escrito después de una ruptura, de un desengaño... y son referente de muchos amores solitarios, pero no temáis esa soledad, porque volverá a llegar el amor, aunque penséis que no, aunque no queráis que llegue... es ley de vida, el ser humano no está hecho para vivir en soledad, aunque creais que es duro volverse a enamorar de nuevo, volverá a suceder, y quien sabe? Definitivamente quizás... sea la definitiva, o puede que no, pero si por un casual, vuelves a caer... levántate!

   Llorar por desamor, por un desengaño, por un desencuentro, no nos hace más débiles, sino más persona!

viernes, 29 de abril de 2011

"Miedo" es sólo un sentimiento más!



   Estas vacaciones me compré 2 libros que me llamaron bastante la atención, "Perdona si te llamo amor" (Federico Moccia) y "Lo verdadero es un momento de lo falso" (Lucía Etxebarria) son dos novelas que hablan de relaciones, de amor, de engaños y desengaños, de sexo, de mentiras, de amistad... al fin y al cabo: De Sentimientos! y creo que en ellos, cada uno de nosotros nos podemos ver identificados en algún personaje; personajes que se sienten vivos, que disfrutan al máximo de lo que hacen, de las experiencias y sus consecuencias...
   Siempre he revindicado la frase "sólo hay que arrepentirse de lo que no se hace" y creo, y estoy completamente convencido de ello, que es una máxima que todos nos deberíamos aplicar en el día a día, hay mucha gente que deja de hacer cosas por el temor a las consecuencias, por el "que dirán", o simplemente por el miedo a hacerlas... y sí, puede que ese motivo sea el principal de los factores, pero que es el miedo? -Una emoción caracterizada por un intenso sentimiento habitualmente desagradable, provocado por la percepción de un peligro, real o supuesto, presente, futuro o incluso pasado. Es una emoción primaria que se deriva de la aversión natural al riesgo o la amenaza, y se manifiesta tanto en los animales como en el ser humano- es decir, otro sentimiento, y como todos los sentimientos, son motores de nuestros actos... pero no nos sentiríamos mejor si desaparecieran todos nuestros miedos? Pues para que desaparezcan, no tenemos que hacer otra cosa, más que poner de nuestra parte... nadie dijo que fuera facil, lo sé, y quizás yo sea una persona con muchos más miedos de los que la gente cree, pero mi intención es irlos superando uno a uno.

   Con todo esto, el lugar donde quiero llegar a parar, es que nos quitemos los temores, a veces infundados, otras creados por experiencias pasadas, que intentemos vivir, ya sea para bien o para mal, pero que no hagamos que nuestro paso por este mundo, sea una mera "existencia", que cuando nuestros días lleguen a su fin, podamos decir que hemos disfrutado de cada momento vivido, de cada segundo consumido, que cualquier palabra dicha, haya salido desde nuestro interior, que cada beso dado, haya sido con el sentimiento correspondiente, que cada paso dado, haya sido por el camino deseado, que cada uno de nuestros sentidos haya experimentado sensaciones hasta el extremo, en consecuencia, que nos hayamos sentido vivos...
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...