Es
poco habitual en mi una entrada en este blog un sábado, pero la
ocasión lo merece... (no sólo vamos a hablar del día de la República) ya que tal día como hoy, 14 de Abril, de hace 100 años a las 23:40 de la noche, chocaba al sur de las costas de
Terranova contra un iceberg este magnífico trasatlántico de lujo,
el barco de mayor tamaño construido hasta entonces, hundiéndose
poco después, a las 2:20 del 15 de Abril.
De los 2.207 pasajeros que esta
magnífico nave transportaba, 1.503 perdieron la vida en las gélidas
aguas del Océano Atlántico, una de las causas del elevado número
de víctimas fue que, a pesar de cumplir con todas las normativas
marítimas de la época, el barco sólo llevaba botes salvavidas para
1.178 personas y aún así sólo se salvaron 704 (el 32% de los
embarcados)
La mayor parte de los pasajeros
no advirtieron nada alarmante e incluso el propio capitán Smith
tardó 20 preciosos minutos en darse cuenta de la situación; sabía
que se iba a desatar el pánico colectivo, por lo cual ordenó obrar
con cautela. Mandó avisar al pasaje, pero procurando restar
importancia al incidente, y sólo a las 12.05, cuando ya el agua
alcanzaba la pista de "squash", ordenó disponer los botes
salvavidas y que se emitiera la llamada de auxilio habitual en
aquella época. Algunos barcos captaron las angustiosas llamadas de
socorro y trataron de acudir a toda máquina; pero, por una ironía
del destino, el radiotelegrafista del Californian se había ido a
dormir, por lo que esta nave, a tan sólo 19 millas de distancia, y
que hubiera podido llegar a tiempo para ayudar eficazmente al
salvamento del pasaje y de la tripulación, no advirtió nada, si
bien es cierto que el segundo oficial del mismo, que se hallaba en
cubierta observó una desusada iluminación e incluso cohetes de
señales, pero no concedió al hecho mucha importancia, atribuyéndolo
a que en algún gran trasatlántico estaban celebrando una fiesta a
bordo.
Se
salvó el 98% de las pasajeras de primera clase, contra un 54,7% de
las de tercera. Entre los hombres de primera se registró un 66% de
supervivientes, contra sólo un 29,4% de los niños de tercera. Si se
observan las cifras totales de las víctimas, se puede comprobar que
perecieron 120 pasajeros de primera clase (el 8%); 162 de segunda (el
11%); 535 de tercera (el 35,5%), y 686 miembros de la tripulación
(el 45,5%).
Este Trasatlántico de lujo era
como un auténtico palacio flotante, comodidades y refinamientos.
Resistía perfectamente la comparación con cualquier hotel de lujo;
disponía de unas 3.000 camas y cada una de sus "suites" de
lujo medía 15m de largo. Contaba también con un paseo de cubierta
privado y sus paredes estaban decoradas con maderas nobles de estilo
isabelino. Los camarotes disponían de muebles de estilo holandés
antiguo y los de primera clase estaban decorados según periodos y
estilos, desde Luis XV hasta la Reina Ana. Se habían cuidado todos
los detalles, contaba con ascensores y un moderno gimnasio, con toda
clase de aparatos, pista de "squash", baño turco y
piscina. En los grandes salones, incluido el de fumadores, disponían
de mobiliario inglés del siglo XVIII. Tenía tres bibliotecas con
más de 30.000 volúmenes, sin contar con enormes despachos y salones
de trabajo, incluso los compartimentos de tercera clase eran muy
confortables para la época. Además de los habituales comedores en
este tipo de embarcaciones, el Titanic disponía de un magnífico
restaurante "a la carta", así como el "Café
Parisien", una exactísima réplica de la cafetería de moda en
aquel entonces. Su escalera principal era de lo más suntuosa que
pudiera imaginarse en un barco (todos la recordamos gracias a la
película de James Cameron)
Hoy solo quedan los restos de
aquel maravilloso buque, quien fue portador de sueños para muchos,
convirtiéndose en el naufragio mas catastrófico de la época.
D.E.P. Sus restos y parte de los pasajeros que yacen en él.
Me ha encantado este post... En serio me ha encantado. Amo el Titanic!
ResponderEliminarMuy buena historia sobre el Titanic... Una desgracia que ocurriera.
ResponderEliminarUn abrazo !!.
Me encantaría estar en Barcelona para poder visitar la réplica del Titanic que tienen allí. La película me gustó sin parecerme tampoco una maravilla, demasiado hollywoodiense para mi gusto.
ResponderEliminarBesotes.
Solo apostillar un detalle: a pesar de ser un oda a la opulencia y la hipocresía, el caso es que el buque fue un logro impresionante de la ingeniería. Los daños provocaron que entrase agua a un ritmo de ocho toneladas por segundo en el casco, eso hubiese supuesto para un barco "normal" haberse ido a pique en 20min; el Titanic tardó casi 3h en hundirse.
ResponderEliminarAl igual que en el reciente Costa Concordia, la ineptitud de los mandos de la tripulación fue la verdadera causante de la tragedia.
Saludos, navegantes, nunca mejor dicho.
Ay, que penica y cuanto experto en la materia nos ha salido y todo gracias a Leonardo Dicaprio, lo que le debemos! Jajaja. Yo de pequeño me quedé impresionado una tarde de sábado cuando pusieron aquella película en el "Sábado de tarde" que había en los 80, y en mente tengo a un anciano abrazado a su nieto en la cubierta del barco... no fue tan efectista como el otro Titanic pero para la época no estuvo mal. Uhm, sobre naufragios puedo hacer yo un par de post, aunque creo que en su día hice uno en costas gallegas de unos marinos ingleses.
ResponderEliminarBicos Ricos